Por Karin Pape, asesora de WIEGO para Europa y la OIT    

A principios de febrero de 2025, una pequeña delegación de HNI y WIEGO viajó a Berlín, Bruselas y París para interactuar con posibles aliados e incidir por la inclusión de las personas trabajadoras en domicilio en las actividades de diligencia debida de las empresas. 

La delegación estuvo compuesta por Suntaree Saeng-Ging (integrante del Comité Ejecutivo de HNI), Zehra Khan (secretaria general de la HBWWF, Federación de Trabajadoras en Domicilio, en Pakistán), Marlese von Broembsen (investigadora y asesora de políticas del Programa de Derecho de WIEGO) y Karin Pape (asesora de WIEGO para Europa y la OIT).

La idea del viaje surgió con la aprobación de la Directiva sobre diligencia debida en materia de sostenibilidad empresarial (CSDDD) de la UE en junio de 2024. Los Estados miembros de la UE disponían de dos años para transponer la Directiva a su legislación nacional. Queríamos asegurarnos de que los derechos de las personas trabajadoras en domicilio se incluyeran en la transposición nacional de la CSDDD de la UE.

HNI, con el apoyo de WIEGO, trabajó durante tres años para garantizar que las personas trabajadoras en domicilio se incluyeran en el ámbito de aplicación de la CDSDDD de la UE. ¡Y lo logramos! 

Nos reunimos con socios como ONG de apoyo, iniciativas multisectoriales, sindicatos y otros sectores. Preparamos un documento de posición y infografías, y dos videoclips (Video 1, Video 2) para ilustrar la situación y las demandas actuales de las personas trabajadoras en domicilio. Demostramos que hay 49 millones de trabajadores y trabajadoras en domicilio en todo el mundo y que constituyen una parte sustancial de las cadenas de suministro mundiales.   

Organizaciones de apoyo: un entorno político hostil    

Mientras tanto, el panorama político ha cambiado en todas partes.  

Durante una reunión del Consejo de la UE en Budapest el 8 de noviembre de 2024, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, indicó que presentaría una propuesta para modificar tres pilares clave del Pacto Verde Europeo mediante una «Ley Ómnibus»: la Directiva sobre la debida diligencia en materia de sostenibilidad corporativa (CSDDD), la Directiva sobre la presentación de informes sobre sostenibilidad corporativa (CSRD) y el reglamento sobre la taxonomía. La intención es hacer que Europa sea “más simple y más rápida”.A pesar de las declaraciones oficiales, como la de la conferencia de prensa posterior a la reunión de la UE en Budapest: "El contenido de las leyes es bueno. Queremos mantenerlo y lo mantendremos",(minuto 29), en la práctica esto significa que las Directivas de la propuesta Ómnibus están abiertas a renegociaciones completas.

Oposición a suavizar las regulaciones protectoras de la UE

Cuando llegamos a Bruselas, nos pidieron que fuéramos a un acto de protesta el 6th de febrero de 2024 en la que la Comisión Europea se encontraba con grupos de presión corporativos. 

Según la CESen total participaron 57 representantes empresariales, dos representantes sindicales, 10 ONG y no se invitó a ninguna de las empresas sostenibles que solicitan la legislación de la UE para una competencia justa y sostenible. 

Además de las redes de coaliciones de ONG con sede en Bruselas y las organizaciones sindicales que protestaron por la suavización del contenido de las directivas de la UE en cuestión, hay varias iniciativas empresariales que piden a la Comisión Europea que mantenga el contenido de la CDSDDD y se concentre en su aplicación oportuna. 

Entre otras, se hicieron públicas las siguientes iniciativas empresariales:

Con la ayuda de la Campaña Ropa Limpia (CCC)  nos reunimos con unas 15 ONG y redes que apoyaron una directiva inclusiva de la UE sobre diligencia debida. Muchas de ellas desconocían la importancia de las personas trabajadoras subcontratadas en las cadenas de suministro mundiales, incluidas las personas trabajadoras en domicilio.  

El  propuesta detallada de la Comisión Europea se publicó el 26 de febrero de 2025.

Se propusieron los siguientes cambios, entre otros:

  • Aplazar el inicio de la CSDD por un año
  • Reducir la secuencia de los informes
  • Reducir el alcance a socios comerciales directos (nivel 1) 
  • Eliminar la obligación de terminar las relaciones comerciales (bajo ciertas condiciones) en caso de incumplimiento de los socios comerciales
  • Reducir el número de partes interesadas que deben participar
  • La definición de sanciones ahora está en manos de los Estados miembros de la UE. La UE solo publicará directrices.   

Si el Parlamento Europeo y el Consejo de la UE aprueban estas propuestas, será muy difícil (si no imposible) para las personas trabajadoras en domicilio reclamar sus derechos laborales en virtud de la nueva CSDDD.

Nuestra visita personal fortaleció las relaciones con las organizaciones de apoyo, y por lo tanto estamos en una buena posición inicial para desarrollar una estrategia adaptada para luchar por los derechos laborales de las personas trabajadoras en domicilio.